05 enero 2006


Hay poemas que no entiendo;

retóricas que buscan

embellecer lo bello,

hacer más digno,

lo cierto,

más profundo lo sencillo

y los alejan del hombre,

fiel reflejo de si mismo,

que busca, que necesita,

verse

en una palabra, en un verso.

Aunque no entienda

el contexto.

Son escorzos de infinito

que llegan al sentimiento,

unos nos hacen vibrar,

otros vibran en silencio,

no tienen nuestra frecuencia

y buscan…

El acomodo perfecto.

A veces pasan dos vidas

tres silencios y una muerte,

sin que encuentren confidente.

Quizá, por eso no entiendo

Poesía Discursiva:
del poemario “buscando mi voz”